Lionne.

Tú...

No eres tu nombre. No eres tu empleo.

No eres la ropa que vistes ni el lugar en el que vives.

No eres tus miedos, ni tus fracasos... ni tu pasado.

Tú... eres esperanza.

Tú eres imaginación.

Eres el poder para cambiar, crear y hacer crecer.

Tú eres un espíritu que nunca morirá.

Y no importa cuántos golpes recibas,

te levantarás otra vez.

lunes, 19 de diciembre de 2011

Nínive (les quatre saisons)


Nínive era frío. Ese frío que se te cuela en los huesos y te hace estremecer. Ese frío que te corroe las entrañas hasta hacerte temblar. Ese frío que te hiela las venas hasta que agonizas, tiritando. Ese frío.
Tenía el cabello tan blanco como la nieve y los ojos del gris de las nubes, la nieve sucia y el papel de periódico. Nínive olía a lluvia y sabía a agua; no pura, pero agua al fin y al cabo. Su piel era tanto o más blanca que sus cabellos, que le llegaban a la cintura. Una estrecha cintura, una figura delgada. Y unas manos finas.
Lo único cálido de Nínive eran sus labios; aun finos y sin apenas carne siempre desprendían calor, continuamente contagiados por los de cualquier otra persona. Y sus labios, además, se atrevían a decir cosas que su corazón, fuerte tímpano de hielo, jamás había sentido.
Cuando Nínive llegó, comenzó a nevar. Nínive era como la lluvia, como el frío, como la nieve, como el invierno. Nínive era el invierno. Y por eso cuando Nínive se fue, el invierno se marchó con ella.

4 comentarios:

Blueli dijo...

Me gustó mucho la entrada *OOO*
Y mmm aniavauvayab que asco de frío hace!
Un besote <3
http://cruzandoelcieloo.blogspot.com/

Kirtashalina dijo...

¡Oh, muchísimas gracias! ^^
Sí, aunque yo ya tenía ganas de que empezase el frío (:

Un beso!

Abel Jara Romero dijo...

Yo soy más de calor, aunque sean 40º xD Es más alegre el verano. Muy buena entrada Diana. Un besazo enorme.

Kirtashalina dijo...

Yo es que siempre tengo calor y me siento más a gusto cuando hace frío x) Aunque sí, el verano es mucho más alegre...

Un beso grande (: